En los últimos años hemos estado observando 
que se ponen de moda una serie de objetos para diferenciar a personas en actos sociales, políticos y otros. Recuerdo las celebres pulseritas brasileñas de diferentes colores y con un machanguito colgando.
Llegue a ver colgada de la muñeca de una persona, hasta 17 de ellas. Decían que eran para la salud, el amor, la suerte, etc…
Luego se pusieron de moda esas cintas de las que colgaban al cuello, tarjetas de identidad o autorizaciones para estar en eventos diversos.
También se puso de moda el clásico lazo de diferentes colores, para poner en la solapa o en el pecho. Con los cuales se daba a entender que el portador estaba de acuerdo con el significado del color. Han llegado a verse, de todos los colores.
Ahora en pleno siglo XXI. Nos encontramos con las pulseritas de goma. Las hay de diversos colores. Y si algún color se repite para diferentes ideas, se soluciona grabándolas con el nombre de la idea preconcebida.
Pues a este caso en particular me refiero. Viendo que a las palomas mensajeras cuando participan en algún campeonato, se les pone una anilla de goma, con una referencia para su control, pues eso.
Hoy vemos como a las personas se les esta anillando, con su propio consentimiento. Como si fueran palomas mensajeras. Realmente es que somos tontos de remate. ¿Cómo es posible, que se llegue a permitir que una idea, que realmente es un negocio para alguien, nos lleve a ponernos esas estupideces. Solo por decir que tenemos una afinidad política o social?.
Los nazis, para diferenciar a los judíos, les ponían una cruz de David en amarillo y además, les gravaban un número en el brazo. Tiempo al tiempo. Llegaremos a ver tatuajes en los cuerpos para diferenciarnos a unos de otros. Palomos, que sois unos palomos.
Y ahora con los tatuajes, otro tanto de lo mismo. Sabían ustedes, que en el Japón antiguo de los Samurais, a los delincuentes, se les marcaba en la frente con un tatuaje. De ahí justamente esos tatuajes por todo el cuerpo, para definirse como delincuentes. La Yakussa, se tatúa todo el cuerpo, en recuerdo a sus antepasados delincuentes.
Pues eso, sigan ustedes siendo unas marionetas de la globalidad, que próximamente se tatuaran con las cejas de ZP.
Palomos, que son unos palomos.
caballerodoramas 