Llevamos ya bastantes semanas, con la impresión de que un barco desaparecido entre la península y Canarias, no interesa a los políticos de estas islas.
El SAULO, un pequeño barco de pesca para recreo, fue comprado en la península por un Canario. Canario que paga sus impuestos en estas islas y que con esos impuestos, mantiene a unos políticos infames. Políticos que no se mojan ni dicen nada que tranquilice a los familiares de la tripulación. 
Tripulación compuesta por dos personas. Suficientes para efectuar la travesía, costeando hasta las islas. El armador JOSE QUEVEDO y el tripulante CRISTO HERRERA, son ya unos experimentados conocedores del mar. Por lo que parece probable que la desaparición, desde el día 11 de Marzo de 2008, después de repostar en Barbate (Cádiz), no es lógica.
Tenemos que analizar el tema con mas definición. Resultando que la baliza de emergencia, no se ha puesto en marcha. Por lo que descartamos el hundimiento. Y sin esta premisa, es lógico que el barco de 10 metros de eslora, 3,6 de manga y dos motores de 580 caballos, siga a flote.
Por información de su hija, Jennifer Quevedo, sabemos que su padre le confirmo vía teléfono móvil, su salida y que posteriormente le iría comunicando la travesía por la misma vía.
Su hija, al observar que no volvía a comunicarse, decidió llamar al móvil de su padre. Encontrándose con la sorpresa de que le responde una voz en árabe o musulmán, que se reía. Lo que nos da ha entender, que el móvil de JOSE QUEVEDO, esta en poder de alguien que no es su propietario. Alguien, que por la zona del trayecto de la travesía, se presupone que debe ser un marroquí. 
Ante esta ilógica desaparición, su hija denuncia el hecho, ante la Guardia Civil. Instituto Armado que pone en marcha un dispositivo para la localización del barco y sus tripulantes.
Salvamento Marítimo, esta emitiendo periódicamente, avisos radiofónicos en la zona de la travesía. Suponemos que sigan en el empeño.
Las autoridades españolas, dicen que se han puesto en contacto con las autoridades marroquíes, para solicitar información sobre el paradero del barco y sus tripulantes. Sin resultado, después de veinte días a fecha de hoy 31 de Marzo.
De las autoridades marroquíes, pues lo de siempre. Si no hay nada a cambio, no se moverán. Ellos con decir que no encuentran nada, simplemente dejan pasar el tiempo y esperan el olvido. Es la costumbre de nuestro querido vecino, que tanto nos aprecia.
Ahora bien, pasemos a repasar los hechos y aclarar algunos puntos, que hasta ahora no se han publicado o por lo menos yo no me he enterado de que se comprobaran.
Tenemos la desaparición después de salir de Barbate (Cádiz). Salvamento Marítimo de la Comunidad Autónoma de Andalucía, no ha recibido señal alguna de la baliza operacional del barco. Por lo tanto no esta hundido.
Lo sencillo es que si lo han secuestrado o pirateado, lancen la baliza al mar y las autoridades lo darán por hundido. 
Tenemos la llamada telefónica de la hija del armador, contestándole una voz en marroquí, que al parecer se reía. Por lo tanto el móvil del armador, esta en manos de un (al parecer) marroquí y los móviles no flotan, en el caso del hundimiento de la nave. Por lo que se presupone que el barco esta atracado y le han robado el móvil. Lo más sencillo es que el armador en el puerto donde este, compre otro móvil y llame a su hija.
Este último hecho, no se ha efectuado por el armador. Así que se presupone, que el barco y su tripulación, esta en manos de piratas. Debido a que las autoridades marroquíes, no dan con el barco en sus puertos.
Y llegando a este punto, nos encontramos, que cuando las autoridades quieren, localizan la situación de un móvil, en cualquier punto del territorio nacional. Y no me vale, el que el móvil, puede estar en territorio marroquí. Telefónica y otras operadoras españolas, tienen sus centrales en el país magrebí, para ahorrarse los sueldos que les deberían pagar a españoles, por tanto no es tan difícil su localización.
Tenemos además, que no se sabe nada de si la Armada Española esta rastreando la ruta del SAULO. Nadie dice nada. Nadie comunica nada. La familia sigue sin información que le aclare o de esperanzas sobre la desaparición de dos súbditos españoles, en aguas marroquíes. 
La embajada española en Rabat, no se da por enterada. El Ministro de Exteriores, esta y no esta. Y tanta, al parecer, dejadez nos lleva a pensar que estas dos personas, no son importantes. Que aquí ocurre algo y las Autoridades Españolas, no se atreven a contravenir lo que digan las Autoridades Marroquíes, como siempre. Dando el caso por cerrado.
Aquí, si no es por la familia, no nos enteramos de la desaparición. Tenemos una impresión de abandono a su suerte y aquí no pasa nada.
Estos días, tenemos un operativo inmenso para la búsqueda de unos submarinistas en Tenerife. Y que conste que no pongo en entredicho, la busqueda de ambos. Pero es que tan personas como los submarinistas, son los dos tripulantes del SAULO.
Desde aquí, pregunto al Gobierno de Gran Canaria, que es el Cabildo, ¿Dónde están posicionados en este caso?, aun desconozco una mínima manifestación sobre el tema. Y también pregunto al Gobierno de Canarias, ¿su posición sobre el tema?. Ambos, no dicen ni aclaran nada. Supongo que este caso se les va de las manos, al ser un asunto internacional. Pero una mínima preocupación por el mismo, es de justicia hacia la familia.
Este Gobierno, no puede exigir al estado nacional sobre temas generales y no preocuparse de dos personas desaparecidas, que son de estas islas y por lo tanto están bajo su responsabilidad.
Espero la pronta aparición de JOSE QUEVEDO y CRISTO HERRERA, por ellos y por sus familias. Lo que no quita, que nuestras autoridades mas cercanas, exijan información sobre el caso, al Gobierno Central.
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