KAFALA

ESPAÑA YA ES ISLAMISTA 100% LA SHARÍA YA ESTA DENTRO DEL CÓDIGO PENAL

LA ÚLTIMA GILIPOLLEZ DEL GOBIERNO DE ESPAÑA, LA ENCONTRAMOS DENTRO DEL CODIGO PENAL ESPAÑOL.LA SHARÍA HA ENTRADO POR LA PUERTA GRANDE EN ESPAÑA
El nuevo MUSLIN español

Habiendo como existen una barbaridad de problemas dentro de España, problemas que siguen sin resolverse,  como que los inmigrantes que cometan delitos sean expulsados de España ellos y sus familias inmediatamente, nos encontramos que ese tal RUIZ GALLARDÓN, se ha dado prisa para solventarle un problema a los islamistas y que quede reflejado en NUESTRO CÓDIGO PENAL. La noticia la copio textualmente y ustedes me dirán a que está jugando el gobierno. Al final, el PP hará bueno al PSOE.
¿QUE COJONES LES DEBEMOS A LOS MOROS?

El texto de la noticia es éste:

El ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, ha introducido en la legislación española una institución del derecho islámico: la kafala. La novedad legislativa ha sido muy aplaudida por los islamistas-radicales marroquíes.

En Marruecos, las mujeres que mantienen relaciones sexuales fuera del matrimonio son condenadas a 1 años de prisión, según establece el Código Penal; y esta sanción punitiva, junto al reproche social, provoca que las madres solteras abandonen  a sus hijos “ilegítimos”, que terminan hacinados en  orfanatos y con muy escasas perspectivas de futuro.
Aproximadamente, cada año 8.700 menores  desamparados ingresan en los orfanatos del Sultán-dictador.  De ellos, la mayoría (el 80%) acaba en el mundo del hampa; otros se suicidan (10%) y el resto consigue integrarse en la sociedad con alguna normalidad. Sin embargo, las autoridades del sultanado, incapaces de proveer a estos niños de una vida ajena a las mayores privaciones y el maltrato infantil, obstaculizan tenazmente que los no musulmanes puedan adoptarlos por una razón: impedir toda posibilidad de que sean bautizados.  Y para evitar que los adoptantes españoles tengan que convertirse al islam en algunos casos  y  se vean obligados, además, a residir varios años en Marruecos, condiciones que, no obstante,  tampoco garantizan el éxito de la adopción, el ministro de Justicia, por motivos “humanitarios” y presiones de su homólogo islamista marroquí,  ha acordado  introducir en nuestro Derecho una peculiar institución de la Sharía, tan opuesta  al sistema jurídico occidental como la poligamia: la kafala. Según la kafala, un guardián “infiel” cuida de un menor musulmán que conserva su nacionalidad y nombre de su familia biológica; por supuesto, el cuidador debe velar para que dicho menor sea educado en la fe de Mahoma y tiene prohibido el establecimiento de una relación parental completa con el niño, como sería el caso de la adopción.
Ruiz-Gallardón anunció el 17 de febrero un cambio en la legislación que impone a los adoptantes españoles la obligación de educar en el islam a sus “adoptados” de origen marroquí; por otro lado, el Gobierno de Rajoy se obliga a establecer un “mecanismo de control” que permita a las autoridades religiosas magrebíes vigilar a los menores hasta que alcancen la mayoría de edad, para asegurarse de que no han sido convertidos al cristianismo. La novedad legislativa  de Gallardón ha sido muy bien acogida por los islamistas de Rabat, pero también por los de Barcelona, unidos éstos últimos en la Asociación de Amigos de Marruecos, ente que se ha lamentado reiteradamente de que algunos “kafires” españoles hayan bautizado a sus hijos adoptados de origen marroquí.
Don Alberto, estrafalario señor con un grandísimo concepto de sí mismo e indultador de corruptos y otros delincuentes, cree que la Santísima Trinidad está formada por cuatro personas: Padre, Hijo, Espíritu Santo y él mismo. Pero la prueba irrefutable que demuestra sus cortas luces  y la natural burrez de su persona es su intención de introducir en nuestro ordenamiento  una boñiga jurídica como la kafala, que posibilitará la resolución de una adopción legalmente constituida si el tierno infante no es capaz de responder,  con soltura y convicción, a las preguntas de un imán adscrito a la Policía Islámica del Pensamiento. Gallardón, siempre tan propenso a la astracanada jurídica, al autobombo y el cultivo de su desmesurado e  inabarcable ego,  nos obsequia con una nueva ocurrencia: la kafala.